¿Estás pensando en colocarte implantes dentales? Si es así, te estarás haciendo muchas preguntas al respecto. Una de las más repetidas es si tu boca está preparada para ellos. Sabemos del esfuerzo por tu parte que supone este tipo de tratamiento, por lo que hacemos todo lo posible para que tenga éxito. Por ello, comprobamos aspectos como la cantidad y calidad de hueso que tienes disponible para que el implante se fije con éxito. En los casos en que sea insuficiente, contamos con técnicas de reconstrucción ósea. ¿Sabes en qué consisten? Te lo explicamos.
Los implantes dentales son una de las mejores alternativas para recuperar la estética y funcionalidad de tu boca. Si decides realizar este tratamiento, tu especialista te pondrá al tanto de las condiciones previas necesarias para aumentar su éxito y predictibilidad.
Son muchos los factores que influyen. Siendo el primero de ellos, y el más importante, partir de un buen estado de salud bucodental, donde no existan patologías en dientes ni encías.
Además, tus hábitos de higiene bucodental deben ser impecables y deberás abandonar costumbres nada saludables, como el tabaco, el alcohol y no realizar la higiene bucodental correctamente. También es fundamental tener un control de las enfermedades sistémicas.
Por todo esto, el primer paso a dar junto con tu especialista es realizar un diagnóstico completo y en profundidad de tu estado de salud general y bucodental. A partir de éste, el especialista determinará la secuencia y procedimiento a seguir.
El diagnóstico comienza con un estudio radiográfico 3D. Mediante él, el doctor comprobará la cantidad y calidad de hueso disponible para la colocación del implante.
Este aspecto es indispensable para realizar un correcto diagnóstico que será clave para el éxito del tratamiento que se va a realizar, ya que en situaciones donde nos disponemos de la suficiente disponibilidad de tejido óseo, los implantes no podrán integrarse con fuerza. ¿Qué técnicas te planteamos para resolverlas?
La carencia de hueso para la colocación de implantes: causas y soluciones
Entre las condiciones necesarias para poder realizar con éxito un implante dental, destacan una adecuada disposición de hueso en altura y anchura.
El implante debe “agarrarse” (proceso de osteointegración) bien al hueso maxilar, de manera que no genere excesivo movimiento ni rechazo durante el proceso de curación e integración. Por tanto, es necesario contar con una cantidad de hueso suficiente para que la osteointegración pueda cursar con éxito y sin complicaciones futuras.
En algunos casos, esta condición no se cumple. El déficit de hueso puede tener varios motivos:
- Carencia prolongada en el tiempo de una o varias piezas dentales.
- Infecciones en la boca.
- Enfermedad periodontal.
- Presencia de quistes o tumores en el maxilar.
- Extracción de dientes demasiado agresiva.
- Prótesis fallidas que no están debidamente ajustadas.
Para aquellos pacientes que presenten procesos con grandes reabsorciones óseas y poca disponibilidad de hueso para la colocación de implantes, contamos con técnicas que permiten aumentar la disponibilidad de hueso.
Mediante estos procedimientos aumentamos la cantidad de hueso, lo que hace posible su colocación e integración. Las más comunes son la elevación del seno maxilar en la zona posterior del maxilar superior y diferentes técnicas de regeneración ósea, o reconstrucción en las distintas zonas de hueso perdido.
Elevación del seno maxilar
Esta técnica de aumento óseo está indicada en aquellas situaciones donde se presente insuficiente altura para la colocación de implantes en la zona posterior del maxilar superior. Esta situación se presenta frecuentemente en personas que han perdido piezas dentales a edades tempranas y de enfermedad periodontal avanzada.
Resumidamente, la elevación del seno consiste en su relleno del seno mediante materiales que actúan como sustitutos del hueso. Tras un periodo de integración y maduración, se consolidan permitiendo la colocación y anclaje del implante.
El seno maxilar es una cavidad de aire, hueca, que se encuentra en la parte más superior del maxilar, paralela a las fosas nasales, posterior a la situación de los caninos y premolares.
La elevación del seno maxilar es un procedimiento quirúrgico que se realiza mediante anestesia local, con el objetivo de acceder a la cavidad para poder injertar el material de relleno.
Como ventaja, no es necesario tomar hueso del propio paciente, sino que se emplean otros materiales biocompatibles (que impiden su rechazo por parte del organismo).
Posteriormente, vendrá un período de consolidación del material injertado hasta que este “hueso artificial” se haya integrado y madurado por completo. Habrá que esperar unos meses hasta la colocación del implante.
Reconstrucción de hueso perdido
Sin embargo, la zona posterior del maxilar no es la única zona de la boca que puede verse afectada por la ausencia o escasa disposición de hueso. Esto también puede ocurrir en el resto de zonas de ambos maxilares.
En el caso de la mandíbula, de igual forma en la zona posterior, también tenemos limitaciones cuando no disponemos de suficiente altura de hueso. Debido a la reabsorción, nos podemos encontrar cerca del nervio dentario.
En lo que al material utilizado se refiere, según las distintas técnicas disponibles para aumentos de altura o anchura podemos requerir del uso de hueso del propio paciente (a veces de un banco de hueso donante), o uso de biomateriales. Todos siendo 100% biocompatibles.
En algunas situaciones menos severas, la reconstrucción del hueso perdido se puede completar al mismo tiempo que la colocación del implante. La excepción está en los casos más severos o que presentan gran reabsorción ósea. En estos, en primer lugar se realiza la propia reconstrucción del hueso y una vez completada la integración, llegará el momento de colocar los implantes.
A la hora de colocar un implante dental, contemplamos todas las posibilidades en función de las condiciones de cada paciente. El análisis 3D previo realizado mediante el TAC y el estudio de la situación nos hará saber si necesitamos aumentar la cantidad de hueso, bien en el maxilar mediante técnicas como la elevación de seno, o con la reconstrucción del hueso perdido en las distintas zonas.
Sea cual sea tu situación, en Coinsol Dental estamos preparados para afrontarla, aportándote soluciones para que puedas disfrutar de las ventajas de los implantes dentales. Que nada te impida sonreír plenamente con tus nuevos y flamantes implantes. ¿Nos llamas y comenzamos a devolverle el brillo a tu boca?
Dra. Patricia Solano. Experta en periodoncia, cirugía e implantología en Coinsol Dental.